Me alegra decir que hoy descubrí que la acelga no solo sirve para las tartas y los canelones. No señor! No señora! La acelga tiene un potencial que hay que animarse a descubrir saliendo de nuestra zona de confort! Bueno, es evidente que el plato de hoy satisfizo grandemente mis expectativas. Si dudan de mi criterio, los invito a probarlo!
Mostacholes tricolor c/n (disculpenme que sea mezquina con algunas cantidades, pero me parece algo insólito decirles cuántos mostacholes son capaces de comer: Uds lo saben claramente)
5 o 6 hojas grandes de acelga
1 cebolla
arvejas
queso sardo
sal
pimienta
aceite
Super fácil:
Hervimos los mostacholes en abundante agua. Les cuento que Donna Hay (escritora y food stylist -te la debo- australiana) dice que no hay que agregarle aceite al agua porque lo que hace que los fideos no se peguen son las burbujas de agua hirviendo. Mis respetos pero yo no me fío y le sigo echando. Testaruda, si. Pero igualmente transmito ese dato.
Ahora, la acelga: Es muy importante lavarla bien, ya que suelen venir muy tierrosas y entre los pliegues de las hojas siempre quedan restos de suciedad. Lavamos 5 o 6 hojas grandes, las apilamos, enrollamos y cortamos como cintitas. Picamos una cebolla y salteamos todo en una sarten mediana.
Cuando los fideos están lindos y listos, los agregamos a las verduras en la sarten y añadimos las arvejas. Salpimentamos.
Para presentar, podemos agregar unos trozos algo groseros de queso sardo y tarán! Un plato delicioso en minutitos nada más.
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